Descubre qué ver en Els Poblets
Descubre qué ver en Els Poblets
Este pequeño pueblo de la Costa Blanca, de origen árabe, disfruta de su trozo en la costa mediterránea y de un paisaje que encanta a todos los que lo visitan por su color verde y sus vestigios llenos de historia. Els Poblets, planes ideales para hacer con niños.
Els Poblets nace en 1971 de la unión de tres núcleos de población, Setla, Mirarrosa y Miraflor, tres alquerías musulmanas conocidas como “Els Llocs”, pertenecientes al Marquesado de Dénia y, posteriormente, al Condado de Parcent.
En este pueblo del Mediterráneo, la Vía Augusta ha tenido su protagonismo, ya que esta era una zona de intercambio comercial y prueba de ello es un yacimiento romano en el que se descubrió un taller de alfarería dedicado a la fabricación de tejas y ánforas. En el que todavía se podían vislumbrar las distintas partes del taller: porches, pozos, hornos y habitaciones. Otro de los descubrimiento son los baños y las termas de la villa romana. Yacimientos que se pueden visitar en cualquier momento y que seguro, no solo atraen a aquellos interesados por la historia. Sino que como actividades al aire libre para practicar en familia son ideales para unas vacaciones de verano.
Su paisaje es verde y está rodeado de naranjales
Esto es gracias a la proximidad del río Girona que facilitó en su momento el desarrollo de la agricultura. Pilar base de la economía de Els Poblets. De tierras fértiles, este pueblo de la Costa Blanca, conserva todavía casas de labranza o almázaras, típicas de ese pasado agrícola que ahora ha dejado paso a la modernidad. Logrando que Els Poblets se convierta en un destino turístico ideal con un ambiente relajado y familiar.
Els Poblets está conformado por diversas urbanizaciones que dan a la costa, mirando y viviendo su playa, la Playa de la Almadrava. Una playa de cantos redondos, muy amplia y tranquila. En la que disfrutar de las vacaciones sin las aglomeraciones de la capital. Esta playa destaca por sus aguas claras y porque es ideal para practicar cualquier deporte naútico como buceo, remo, vela o o disfrutar de una tarde-noche de pesca desde la silla. Reconstruyendo las artes de pesca que se usaron durante siglos en las aguas de la playa de la Almadrava.
Descubre sus calles
Si paseas por el pueblo puedes disfrutar de sus edificios históricos como la pequeña iglesia de Sant Josep o la Parròquia del Salvador, patrón del pueblo, que según la historia. Cuenta que se encontró en una roca en la playa de la Almadrava. En honor a este último se celebran a principios de agosto las fiestas patronales de Els Poblets con un programa de fiestas repleto de actividades para todos los públicos y que se llevan a cabo con las fiestas de Moros y Cristianos, otra festividad digna de ver y vivir en directo.
Otro edificio que se conserva de su época medieval es la Torre de Mirarosa. Una torre de vigilancia de arquitectura militar renacentista que se construyó entre los siglos XV y XVI para defender y controlar el acceso a la población y que ahora está perfectamente integrada con el paisaje urbano de Els Poblets.
Su gastronomía está como no arraigada a un intenso sabor a mar. Mariscos, una amplia variedad de pescado fresco… Permiten elaborar ricos caldos y platos típicos marineros como el arròs a banda que son auténticos placeres para el paladar. De esta costumbre marinera, se conserva la elaboración artesanal de salazones: mojama, anchoas, “els capellans”, la melva, el bacalao o “el bull”. Los puedes encontrar en muchos de sus bares y restaurantes. Incluso comprar en algunas tiendas de alimentación y si te gusta conocer más profundamente a la gente del pueblo, les puedes preguntar, seguro te aconsejan para probar el mejor salazón de la comarca.
Anota este destino a tu próximo viaja a la Costa Blanca, seguro que te encanta y lo que sí está asegurado. Es que si buscas realmente desconectar del ruido, de las aglomeraciones y descansar para volver cargad@ de energía, en Els Poblets, vas a encontrar todo lo que puedes encontrar en un lugar turístico repleto de gente pero con la ventaja de que es un destino tranquilo y familiar que te permite recargar las pilas.
Descubre qué ver en Els Poblets
Este pequeño pueblo de la Costa Blanca, de origen árabe, disfruta de su trozo en la costa mediterránea y de un paisaje que encanta a todos los que lo visitan por su color verde y sus vestigios llenos de historia. Els Poblets, planes ideales para hacer con niños.
Els Poblets nace en 1971 de la unión de tres núcleos de población, Setla, Mirarrosa y Miraflor, tres alquerías musulmanas conocidas como “Els Llocs”, pertenecientes al Marquesado de Dénia y, posteriormente, al Condado de Parcent.
En este pueblo del Mediterráneo, la Vía Augusta ha tenido su protagonismo, ya que esta era una zona de intercambio comercial y prueba de ello es un yacimiento romano en el que se descubrió un taller de alfarería dedicado a la fabricación de tejas y ánforas. En el que todavía se podían vislumbrar las distintas partes del taller: porches, pozos, hornos y habitaciones. Otro de los descubrimiento son los baños y las termas de la villa romana. Yacimientos que se pueden visitar en cualquier momento y que seguro, no solo atraen a aquellos interesados por la historia. Sino que como actividades al aire libre para practicar en familia son ideales para unas vacaciones de verano.
Su paisaje es verde y está rodeado de naranjales
Esto es gracias a la proximidad del río Girona que facilitó en su momento el desarrollo de la agricultura. Pilar base de la economía de Els Poblets. De tierras fértiles, este pueblo de la Costa Blanca, conserva todavía casas de labranza o almázaras, típicas de ese pasado agrícola que ahora ha dejado paso a la modernidad. Logrando que Els Poblets se convierta en un destino turístico ideal con un ambiente relajado y familiar.
Els Poblets está conformado por diversas urbanizaciones que dan a la costa, mirando y viviendo su playa, la Playa de la Almadrava. Una playa de cantos redondos, muy amplia y tranquila. En la que disfrutar de las vacaciones sin las aglomeraciones de la capital. Esta playa destaca por sus aguas claras y porque es ideal para practicar cualquier deporte naútico como buceo, remo, vela o o disfrutar de una tarde-noche de pesca desde la silla. Reconstruyendo las artes de pesca que se usaron durante siglos en las aguas de la playa de la Almadrava.
Descubre sus calles
Si paseas por el pueblo puedes disfrutar de sus edificios históricos como la pequeña iglesia de Sant Josep o la Parròquia del Salvador, patrón del pueblo, que según la historia. Cuenta que se encontró en una roca en la playa de la Almadrava. En honor a este último se celebran a principios de agosto las fiestas patronales de Els Poblets con un programa de fiestas repleto de actividades para todos los públicos y que se llevan a cabo con las fiestas de Moros y Cristianos, otra festividad digna de ver y vivir en directo.
Otro edificio que se conserva de su época medieval es la Torre de Mirarosa. Una torre de vigilancia de arquitectura militar renacentista que se construyó entre los siglos XV y XVI para defender y controlar el acceso a la población y que ahora está perfectamente integrada con el paisaje urbano de Els Poblets.
Su gastronomía está como no arraigada a un intenso sabor a mar. Mariscos, una amplia variedad de pescado fresco… Permiten elaborar ricos caldos y platos típicos marineros como el arròs a banda que son auténticos placeres para el paladar. De esta costumbre marinera, se conserva la elaboración artesanal de salazones: mojama, anchoas, “els capellans”, la melva, el bacalao o “el bull”. Los puedes encontrar en muchos de sus bares y restaurantes. Incluso comprar en algunas tiendas de alimentación y si te gusta conocer más profundamente a la gente del pueblo, les puedes preguntar, seguro te aconsejan para probar el mejor salazón de la comarca.
Anota este destino a tu próximo viaja a la Costa Blanca, seguro que te encanta y lo que sí está asegurado. Es que si buscas realmente desconectar del ruido, de las aglomeraciones y descansar para volver cargad@ de energía, en Els Poblets, vas a encontrar todo lo que puedes encontrar en un lugar turístico repleto de gente pero con la ventaja de que es un destino tranquilo y familiar que te permite recargar las pilas.